Historia de la Dieta Mediterránea
Comer bien para tener buena salud es fundamental en la dieta mediterránea. El estilo de vida de los pueblos de la región ha sido moldeado por la disponibilidad de alimentos saludables y sabrosos. Culturas como las del Mediterráneo han desarrollado una comprensión de las complejas propiedades integradas de los numerosos alimentos que consumen.
Comer bien es un hábito que se practica en todo el mundo. Sin embargo, en las regiones del mundo en las que los alimentos son estacionales y las plantas se pican y cuelgan, mantener flores y frutas cortadas se ha convertido en una necesidad. En estas partes del mundo, la mayoría de los alimentos se adaptan a las condiciones climáticas locales y al gusto de la región. Sin embargo, la dieta mediterránea es un ejemplo de cómo comer bien haciendo hincapié en los alimentos que se consumen en la región.
Entonces, ¿cuáles son los beneficios de observar los hábitos alimentarios saludables de los pueblos de la región mediterránea? ¿No sería sensato concluir que permiten prevenir el cáncer? Ciertamente, el cáncer no es frecuente en las regiones del Mediterráneo.
Se ha comprobado que en los países europeos las verduras están presentes en grandes cantidades, mientras que enTurquía la carne no se consume habitualmente, por lo que las verduras deben constituir la mayor parte de la dieta.
Hay algunos ingredientes que se utilizan en la preparación de los alimentos de la dieta mediterránea que proporcionan buenos resultados en la prevención del cáncer. El ajo y las espinacas tienen un alto contenido en antioxidantes. Las cebollas y los tomates también son beneficiosos. En la dieta mediterránea se recomienda incluir el vino en la ración diaria de alcohol. Esto encuentra apoyo en el estudio de los investigadores debido al papel del vino tinto en la dieta mediterránea.
Sin embargo, algunos alimentos como las patatas, el maíz, las zanahorias, las judías, los mangos, los huevos y el aguacate destacan por promover la buena salud y por prevenir el cáncer.
La noción de que el cáncer es una enfermedad estacional surge del hecho de que en ciertas partes del año hay una mayor incidencia de cáncer que en otras. Las hortalizas cultivadas en la región del Mar Mediterráneo destacan por serLas mejores.
Según la dieta mediterránea, los alimentos ricos en antioxidantes son buenos y tienen efectos beneficiosos para las células humanas. Esto incluye también a los tomates, que se presentan en varias formas, como la salsa y el zumo. El zumo de limón, que es Lean dioidal, conserva las propiedades antioxidantes de la fruta. La observancia de los cultivos cultivados en las vacaciones del Mar Mediterráneo en ocasiones de aliviar la enfermedad de Cánceres.
Afirmaciones sin fundamento en las que se afirma que las grasas trans son la causa del avance del cáncer, que las grasas saturadas ayudan al avance del cáncer o que los antioxidantes destruyen las funciones de algunas sustancias químicas;
Estas afirmaciones no están respaldadas por hechos científicos. Todos los tipos de grasas en la cadena alimentaria son necesarios y tanto un exceso como un defecto pueden causar algún tipo de daño.
En primer lugar, hay grasas que no se depositan en el cuerpo. Las proteínas sub-grasas son muy necesarias en el cuerpo. Son necesarias para obtener energía. También son necesarias para la construcción de las células.
En segundo lugar, se sabe que algunas de estas proteínas subgrasas se metabolizan en colesterol, por lo que en la zona mediterránea se recomiendan las dietas ricas en grasas.
Hay que tener en cuenta la aparición de cáncer con el creciente número de personas que adoptan la dieta mediterránea. Esta dieta consiste en alimentos ricos en frutas, verduras, semillas y frutos secos. También se hace hincapié en los alimentos ricos en pescado.